Hidalgo es uno de los estados con mayor tradición minera de México. En el siglo XVI, radicó ahí un famoso metalurgista llamado Bartolomé de Medina, mejor conocido por desarrollar un procedimiento llamado “beneficio de patio”, que cambió la historia de la minería al separar la plata o el oro de otros metales, mediante el uso del mercurio y de diferentes tipos de sal.
Bartolomé descubrió el procedimiento en las minas de Pachuca y Real del Monte, durante un periodo en el que los metales preciosos eran una de las principales fuentes de riqueza de los gobiernos y monarquías; sin embargo, los métodos de extracción y separación de aquel entonces tenían importantes deficiencias y se vieron beneficiados con el invento de Bartolomé.
El Beneficio de Patio consiste en mezclar mercurio, plata, sulfuro de hierro o cobre, todo triturado y con textura de harina, esparcida en depósitos rectangulares poco profundos, con agua, sal y mercurio en cantidades apropiadas. Tras varias semanas de continuados movimientos, era lavada, de manera que el mercurio y la plata resultante eran separados mediante el calor.
Este proceso resultó ser toda una innovación para la industria minera, pues permitió obtener plata a bajo costo y estuvo vigente por mucho tiempo. Las innovaciones tecnológicas actuales son aún más eficientes y nobles con el medioambiente pero, sin lugar a dudas estos esfuerzos por mejorar los procesos mineros marcaron un antes y después.
En Autlán reconocemos los importantes aportes científicos al proceso minero de Bartolomé, motivo por el cual el Colegio Bartolomé de Medina en nuestra comunidad de Otongo lleva su nombre.